Unos vecinos ayudaron a una mujer que estaba siendo asaltada por dos motochorros. Cuando los malvivientes le estaban despojando de su teléfono móvil, la víctima comenzó a gritar y esto alertó a los habitantes de la zona.
Los vecinos reaccionaron y lograron detener a uno de los responsables. Tras reducirlo a golpes, lo entregaron a las autoridades. Posteriormente, debido a las lesiones que sufrió, los efectivos policiales decidieron llevarlo a un centro asistencial.