El trágico suceso ocurrió el pasado sábado cuando la víctima se preparaba para festejar su cumpleaños. Su expareja, quien contaba con orden de alejamiento, llegó a la casa con una torta decorada y su arma de fuego en la cintura.
Según testigos, ambos discutieron en el portón y cuando la mujer ingresó a la casa, realizó varios disparos que acabaron con su vida. Luego de lo ocurrido, el hombre también se disparó en la cabeza.
El Crio Eladio Martinez, jefe de seguridad ciudadana, comentó que la mujer tenía tres hijos que ahora quedaron huérfanos. Mencionó que los vecinos llamaron a la policía y cuando llegaron a lugar ambos, victima y victimario, ya estaban muertos.