Los procedimientos y las investigaciones continúan. El Comisario General Marcelino Espinoza, director general de Investigación Criminal, detalló que la tarea de allanamiento culminó en Ciudad del Este.
Entre las evidencias incautadas se encuentran aparatos celulares, y la investigación permitió la detención de tres personas. Una de las personas detenidas es una mujer identificada como Elda.
Según los investigadores, Elda realizó un giro a nombre del tirador, quien es menor de edad, por una suma de G. 300.000, una vez que el hecho criminal se había materializado. Se cree que el dinero fue recibido por los dos jóvenes para trasladarse a Ciudad del Este.
Cabe recordar que inmediatamente después del crimen, los sujetos se trasladaron en transporte público, bajándose en la terminal de Ciudad del Este, donde fueron “rescatados” por una persona cuyo paradero aún se desconoce.
Una tercera persona fue detenida durante los operativos por la tenencia de droga peligrosa, específicamente crack y cocaína. La Dirección de Antinarcóticos ya está realizando el trabajo de campo relacionado con este hallazgo.
El objetivo primordial de la investigación, según el Comisario Espinoza, es llegar al mandante de este hecho lamentable.
Un avance crucial en la investigación se centra en la posible identificación de uno de los sicarios. Hace unos días, se encontró un cuerpo dentro de una bolsa en Puerto Irala, Alto Paraná.
Los investigadores solicitaron que el cuerpo fuera derivado a la morgue para realizar estudios técnicos debido a ciertas similitudes. Específicamente, existe una imagen captada en una estación de servicio después del asesinato, donde uno de los sujetos, el tirador (menor de edad), dejó visible un tatuaje.
El cuerpo rescatado de las aguas del río Paraná presenta las mismas características y los tatuajes son iguales.
Para poder sostener la identificación de forma científica, se está coordinando una prueba genética (ADN). La madre del joven fue convocada para tener el documento que le permita acceder a que se le entregue una muestra para la prueba. Aunque existen muchas similitudes y datos técnicos, no se podrá confirmar con certeza si el cuerpo pertenece al tirador hasta que se obtengan los resultados.
La última conexión o ubicación técnicamente probada de los sujetos fue en el barrio San Rafael de Ciudad del Este.