Según el informe, la mujer ya no aguantó la persecución constante, por lo que se presentó ante el Ministerio Público en compañía de un abogado. De acuerdo con su versión, el intendente incluso llegó a usar la fuerza para someterla sexualmente.
“El intendente puso la mano sobre el muslo de ella. Incluso intentó besarla. Fue ahí cuando la víctima reacciona y le pide que se baje de su vehículo. Entonces eso fue la gota que colmó el vaso de agua. Ella le comentó al esposo y el esposo le dijo que se retire de la Municipalidad”, relató el abogado Miguel Cabrera.
Agregó que a cambio de su silencio, el jefe comunal dijo que se iba poner al día con los salarios atrasados y también le iba a comisionar en el Centro Cultural de Acahay. Sin embargo, eso no se dio y la mujer tuvo que dejar el trabajo. “Lo que el intendente no cumplió fue el pago de los salarios atrasados. Tanto que al vencimiento del contrato mi cliente salió definitivamente de la Municipalidad”, relató.
El intendente ya fue denunciado por otra exfuncionaria municipal quien presentó varios elementos como prueba que respaldan la imputación, según el fiscal Alcides Espínola. La mujer se desempeñaba como su secretaria pero también tuvo que renunciar a su trabajo.