De acuerdo con datos del Ministerio Educación y Ciencias, unas 400 escuelas cuentan con letrinas insalubres, y a pesar de esto, el ministro Luis Ramírez prácticamente justificó los gastos superfluos que se llevan a cabo en el Congreso en lugar de invertirlos en el área de educación.
“Yo creo que tenemos que optimizar, pero tampoco satanizar algo que es una necesidad”, dijo con relación a los sillones para el Congreso por casi G. 6.000.000 cada uno. “El Estado no funciona así: ‘Esto es urgente’. El Estado tiene su sistema de funcionamiento”, remarcó.