Los delincuentes, descritos por la víctima como un grupo de aproximadamente nueve personas, todas fuertemente armadas, sorprendieron a la familia. La dueña de casa fue amenazada por uno de los sujetos. En un momento de forcejeo, la víctima logró zafarse junto con sus hijos e ingresaron a la casa de un vecino para resguardarse.
A pesar de que la familia logró escapar inicialmente, los asaltantes continuaron con el atraco, realizando disparos intimidatorios. Afortunadamente, no lograron herir a nadie. Los delincuentes ingresaron a la vivienda de las víctimas y se alzaron con un millonario botín, que ascendería a más de 200 millones de guaraníes, además de llevarse el sistema de grabación de las cámaras de seguridad.
La comerciante afectada relató que pudo identificar plenamente a uno de los asaltantes, a quien se refirió como “el gordito”, quien fue el primero en ingresar y abordarlos. Narró el terror vivido, escuchando seis disparos y cómo sus hijos, menores de edad, quedaron traumatizados, aunque agradecida de que físicamente se encuentran bien.
Minutos después de la intervención policial, uno de los presuntos autores fue detenido, pero lamentablemente no se logró recuperar el dinero sustraído a las víctimas