La investigación sobre la muerte de Fernanda Benítez ha revelado el contenido de mensajes intercambiados entre el principal sospechoso, un adolescente de 17 años, y una amiga mayor de edad, quien ahora está imputada y con orden de captura.
Estos escalofriantes y macabros diálogos se han incorporado a la carpeta del Ministerio Público.
Los mensajes descubiertos sugieren una supuesta planificación en torno a la situación de Fernanda Benítez. Las conversaciones entre el sospechoso y su amiga discuten opciones para abordar un “problema” (el embarazo), incluyendo la posibilidad de “hacer perder” a Fernanda o de quitarle la vida.
Según los mensajes, inicialmente se intentó resolver la situación con una pastilla que “no le funcionó". Luego, el joven pide a su amiga buscar a alquien que pudiera “hacer perder” (el bebé) a Fernanda, a cambio de dinero.
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Posteriormente, surgió la idea de matarla y enterrarla en un terreno vecino. La conversación se centró en un método específico: inyectar una pequeña cantidad de aire en una vena o arteria principal para causar una muerte “rara” y supuestamente indetectable.
El sospechoso finalmente menciona que está decidido a llevar a cabo el plan del aire, planeando darle previamente un somnífero (clonazepam) en su casa.
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Las primeras conversaciones citadas, en las que el sospechoso menciona tener un “problema” y el fracaso de una pastilla, datan del 27 de abril, exactamente un mes antes de la desaparición de Fernanda.
Los mensajes más recientes y detallados sobre la discusión de la muerte y el método del aire son del 22 de mayo, pocos días antes de su desaparición.