Según las cámaras de seguridad, la víctima había dejado la cajuela de su auto abierta y Elías Ojeda aprovechó para robar un neceser que contenía 2.500.000 y tres teléfonos celulares.
Lo más llamativo es que, tras el robo, Ojeda se cruzó con la víctima y la saludó con un puño, disimulando el bolso robado con la misma mano.
La “viveza” y la audacia del acto, sin uso de violencia, quedaron registradas. Elías Ojeda fue detenido recientemente. Fue localizado gracias a las imágenes de seguridad y a la última señal de uno de los teléfonos robados.
El joven se encuentra ahora a disposición de la fiscalía. El Subcomisario Godoy del Departamento de Investigaciones de Asunción proporcionó detalles sobre el caso.