Según el relato de los afectados, la banda aprovechó el momento en que los dueños salieron para una actividad de sus hijos.
Los delincuentes se movilizaban a bordo de un automóvil negro. Dos de los hombres descendieron y forzaron el portón principal, luego ingresaron a la casa tras forzar la puerta principal, mientras que un tercer sujeto se quedó en el vehículo actuando “de campana” con el motor en marcha.
En cuestión de minutos, los ladrones lograron alzarse con numerosos objetos de valor, incluyendo televisores, teléfonos móviles, joyas y dinero en efectivo.
El afectado, Rubén Sanabria, señaló que, para no dejar pistas, los delincuentes se llevaron incluso el DVR (grabador de video) de las cámaras de seguridad de la casa.
Vecinos de la zona confirmaron que este mismo grupo criminal ya había operado en cuadras cercanas con el mismo modus operandi, esperando la salida de los dueños para ingresar y vaciar prácticamente el lugar. Los vecinos y las víctimas exigen a la policía que actúe lo antes posible ante el temor de que esta banda vuelva a golpear en la zona.