Anoche en el programa “Leyendas urbanas” estuvo como invitado Palo Rubin hablando de “El conejo”, programa con el que cumplió 27 años de estar al aire. Luis le consultó si es complicado hacer humor, teniendo en cuenta que en gran parte del programa tienen bloques de humor, tanto por una cámara oculta como mediante sketches.
“El punto es que si sos productor y conductor como yo, es respetar aunque a vos no te guste”, afirmó Palo. “En todos los años me traían ideas, algunas me parecían agilísimas, pero decía: ‘hagan’. Y después veíamos para la estructura”, alegó. “Espero a que llegue el lunes y veo el resultado con el rating. Veo lo que funciona y lo que no, lo que funciona se sigue haciendo”, señaló.
Posteriormente recordó cuando en una oportunidad fueron a Brasil y debido a una cámara oculta los cronistas terminaron presos. “La cámara era una supuesta monja que preguntaba cómo ir a tal lugar y de pronto de la biblia se le caían unas fotos porno. En pantalla no salía eso, pero los que caían en la broma veían. Y después pasó que en esa zona había una congregación evangélica fuerte que hizo una queja y fueron presos”, relató.
También explicó que pese a que pasaron muchas chicas por el programa no hubo mayor problema en su casa. Aunque reconoció que es la gente la que a veces desea crear los rumores. “La perrada quiere molestar, hubo un tiempo que le torturaban a Sonia (su señora) donde iba; en la peluquería por ejemplo. Y empezaban con el tema. Pero son demasiados años y después acordáte que fueron entrando mis hijos en la producción, un tiempo estuvo Suelí con su marido Pablito, después Rubén, incluso en la conducción. Y después Ilianita que es la encargada de los invitados y las conejitas”.
