Habitantes de la zona enviaron videos que muestran cómo delincuentes ingresan con absoluta tranquilidad a las casas, forzando puertas y ventanas tanto de día como de noche para robar artículos electrónicos y objetos de valor.
Una de las víctimas relató que un delincuente ingresó a su casa alrededor de las 4:30 de la madrugada mientras ella dormía, forzando una reja para llevarse una consola de PlayStation y una radio portátil.
Los vecinos lamentan que no ven ni a la Policía ni a los agentes Lince, a pesar de que se les asignaron patrullas. Exigen a la comisaría que intensifique sus recorridas, ya que la delincuencia los afecta “día y día”, incluso a las 8:30 de la noche. Se sienten totalmente abandonados por las autoridades.