La policía, incluyendo efectivos antimotines, estableció un cordón en la zona para impedir que los manifestantes avanzaran más cerca de la vivienda.
Inicialmente, los manifestantes negociaron para poder avanzar unos metros y realizar una conferencia de prensa con sus voceras.
La protesta se relaciona con la “brutal represión” y la detención ilegal de unos 30 jóvenes trabajadores ocurrido hace una semana.
Uno de los manifestantes se quejó de que se les incautaron “cosas tan estúpidas” como una “Banana”, y lamentó que, ante las necesidades de los trabajadores, la respuesta del Estado fuese la represión.
Una vocera indicó que este evento es “un mitin” para convocar a una asamblea general el día 11 y a una marcha el 17 de octubre, en cercanías de Mburuvicha Róga.