Según su testimonio, alrededor de las 21:00 horas, mientras caminaba hacia la parada de colectivo, fue obligada a subir a un automóvil oscuro. Uno de los hombres le preguntó por una dirección y, en ese momento, otro sujeto la redujo a la fuerza y la introdujo al vehículo. La víctima relata que le pusieron un pañuelo con una sustancia en la nariz que la dejó inconsciente, y desde ese momento, sus recuerdos son fragmentados.
La mujer despertó en un domicilio desconocido, en una cama mojada y con dolores en la entrepierna, lo que sugiere un posible abuso. Durante los dos días que duró su cautiverio, solo le dieron agua y la volvían a sedar. Sus captores le quitaron el celular y enviaron un mensaje a su madre, asegurándole que todo estaba bien para evitar sospechas.
Finalmente, en la madrugada del 17 de junio, los hombres la abandonaron cerca de una plaza en Asunción. Transeúntes la ayudaron a contactar una plataforma móvil para regresar a su hogar. Tras dormir varias horas, la joven acudió a la policía para realizar la denuncia y posteriormente se sometió a estudios médicos en un hospital.
El comisario Rodolfo Sánchez, subjefe de la Comisaría Décima de Roque Alonso, se encuentra a cargo de la investigación.