Collar destacó que el pueblo católico debe “ponerse en acción” y colaborar desde las comunidades e iglesias para acompañar a quienes más sufren. Recalcó que la falta de compromiso social es una barrera que impide construir un Paraguay más fraterno.
Entre las problemáticas que mencionó figuran la pobreza extrema, el hacinamiento en cárceles, la presencia de indígenas en las calles, la violencia, los abusos de poder y de menores, el narcotráfico, la trata de personas y la creciente polarización social. Llamó a asumir el tiempo de Adviento como una oportunidad de conversión, servicio y diálogo para sanar estas heridas.