Según el reporte, el camión ingresaba a territorio nacional cuando se cruzó con un bus en medio del puente. Las piscinas transportadas llegaron a “trancarse” por la estructura del colectivo impidiendo el tránsito. La situación fue tal que, por momentos, ni siquiera las motocicletas podían circular por la pasarela internacional durante casi una hora o más.
Para poder liberar la vía, agentes de la Policía Municipal de Tránsito del lado paraguayo y la rodoviaria en el lado brasileño tuvieron que intervenir. Las autoridades se vieron obligadas a suspender el paso y luego de mucho trabajo en el medio del puente, lograron finalmente liberar el camión con las piscinas y el colectivo para que pudieran continuar su viaje.