Cesar Zaracho recibió dos balazos de arma de fuego a la altura de la espalda y costado, ambos lado izquierdo, durante el asalto a un transportador de caudales en la ciudad de Capiatá y finalmente falleció dos días después.
Según el relato de su esposa Liz, sus últimas palabras fueron “dispararon a un inocente”. En contacto con Telefuturo la mujer pidió que se investigue el hecho y se haga justicia.
“Lo que queremos es justicia y decir por qué los de Prosegur estaban ahí a esa hora donde justo había más gente. Hoy día yo me quedo desamparada, él era el que traía el pan de cada día. Mi hijo era asegurado de IPS y ahora no tenemos nada”, mencionó.