El incidente ocurrió sobre la Avenida San Isidro y su intersección con la calle San Ignacio, donde el vehículo colisionó primeramente contra un poste de Copaco. La fuerza del impacto fue tal que arrastró otras dos columnas más, afectando así a un total de tres postes y el tendido eléctrico. Como resultado, toda la cuadra y parte del barrio quedaron sin energía eléctrica y sin líneas telefónicas bajas.
La situación se agravó aún más cuando los vecinos reportaron que el mismo vehículo también golpeó una cañería de la ESSAP, dejando a los residentes sin acceso a agua potable. Con esto, los habitantes se encuentran sin luz, sin teléfono y sin agua potable, generando una gran indignación y reclamos por la pronta reposición de los servicios.