La gladiadora comentó que buscaba una academia de boxeo, pero al no encontrar una cercana, probó con una academia de Taekwondo, que era lo más cercano a su casa.
Daniela indicó que el entrenamiento inicia siempre con el saludo a la bandera, seguido de un breve calentamiento y el importantísimo estiramiento antes de entrenar.
Una enseñanza muy importante que el Taekwondo le dejó a Daniela es el autocontrol. Antes de practicarlo, ella se describe como muy impulsiva, nerviosa y con ganas de pelear, razón por la cual buscaba boxeo.
Aunque el Taekwondo también le atrajo por el aspecto del enfrentamiento, enfatiza que no es solamente pelea también ofrece ayuda en el día a día, haciendo hincapié en los valores que transmite.