La pequeña estaba jugando con otros niños en el patio de una casa aparentemente abandonada. Al parecer, la tapa de madera del pozo, que estaba seco, cedió o tenía una abertura por donde cayó.
Los otros niños pidieron ayuda enseguida, y bomberos de Encarnación y Cambyretá llegaron rápido. Unas 40 personas trabajaron por 40 minutos, usando equipo especial, para sacarla.
¡La buena noticia es que fue rescatada “sana y salva”!. Aunque le dolía las piernas y rodillas, no tuvo lesiones graves y ya está en su casa con su familia después de ir al hospital para chequeos.
Los bomberos nos recuerdan: ¡Mucho cuidado con los chicos jugando en casas abandonadas o lugares peligrosos como pozos!. Por suerte, esta historia terminó bien.