Las horas de sueño recomendadas para diferentes edades: De cero a pocos meses: aproximadamente 15 a 17 horas. Lactantes hasta el año: hasta 15 horas. Preescolares hasta los 3 años: 13 horas. Adolescentes: de 8 a 10 horas. Adultos: casi 8 horas.
El sueño es un momento reparador donde principalmente las neuronas se “reconstruyen”, lo cual es esencial para captar lo aprendido durante el día, ayuda a la memoria y nos estabiliza emocionalmente. Físicamente, también se producen hormonas como la hormona del crecimiento.
Aunque cada etapa tiene su cantidad de horas, hacer que el niño o niña se duerma es lo que a veces cuesta mucho. Por ello, se recomienda seguir ciertas rutinas antes de dormir. El baño con agua tibia ayuda muchísimo y es relajante. Evitar las pantallas (celular, computadoras, televisión) porque emiten una luz que activa el cerebro, ir a la cama siempre a la misma hora, incluso en vacaciones.
Hablarle suave al niño y conversar también puede ayudar. La rutina de sueño es importante para todo lo relacionado con el aprendizaje, ya que las neuronas se desarrollan mejor.