Los falsos agentes chocaron el portón con su vehículo para ingresar, pero el propietario, Edgar Ángel Aquino Ramírez, logró refugiarse en su dormitorio junto a su pareja y su hija menor.
Al percatarse del engaño, efectuó varios disparos desde el interior para repeler el ataque, lo que obligó a los delincuentes a huir sin concretar el robo.
En el lugar quedaron destrozos y una billetera con una placa policial falsa. Vecinos registraron imágenes de los asaltantes mientras escapaban apuntando con armas láser. La Policía Nacional llegó minutos después y continúa investigando el caso.