Hoy no damos los pésames, hoy celebramos la vida de un gran hombre que dio todo y cumplió con cada uno de sus sueños. Gracias Humberto por tanto, por el legado a todo los periodistas, el país y el ambiente. El legado es gigantesco.
Tras ser velado por varias horas, los restos de Humberto fueron trasladados este martes hasta su casa, Radio Ñandutí. En el lugar se instaló un micrófono abierto, ante la presencia de una multitud que pasó a despedirlo.
La artista Berta Rojas le llevó un emotivo homenaje a Humberto, en la propia cabina que ocupó por décadas y donde ella asegura que hoy sintió la presencia de su alma.
Amado Nery Fariña, compañero de Humberto por más de 4 décadas, señaló que tenía un gran corazón y lo recuerda como alguien muy estricto con el horario. Comentó la anécdota unos días que comenzó a llegar tarde a la radio, en la tercera ocasión Humberto le preguntó la causa y él le indicó que su vehículo era antiguo y comenzaba a tener diversas averías.
“Y me regaló un auto 0 kilómetro para no llegar más tarde”, recordó ‘Amadito’.
Alguien que inició también su carrera periodística con el gran maestro fue Oscar Acosta, uno de los que tomó el micrófono hoy frente a radio Ñandutí, comentando aquellos años y agradeciendo por la enseñanza de la dignidad, el respeto y luchar contra la injusticia, y que compartir un trabajo de periodismo es importante para crecer como personas y sociedad.