Hace 21 años que las fiestas de fin de año tienen un sabor amargo y con mucha tristeza para la familia Ramírez Velázquez. Una bala perdida había caído por Rody Rodrigo de 10 años de edad cuando cenaba con sus padres, cegando su vida.
Desde ese día, don Leonardo promueve una campaña que pretende concienciar a la ciudadanía para evitar la práctica de utilizar armas de fuego para celebrar las fiestas, ya que cualquiera puede pagar con su vida la inconciencia de otros.
Cabe recordar que la muerte del pequeño quedó impune lo que hizo que el dolor sea aún más fuerte.
''Le llevé al hospital, pero ya no se pudo hacer nada porque la hemorragia interna fue fatal. Este caso quedó impune por más de que haya llevado las pruebas cerraron el caso y yo sigo con el lamento’’, expresó el hombre.