La actividad se realizó en el Hospital Regional de Coronel Oviedo, departamento de Caaguazú. En el sitio se encontraban varias autoridades, entre ellas el presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
Aníbal Rojas, padre del pequeño Axel, indignado y cansado de las carencias interrumpió el discurso de Nicanor Duarte Frutos y a los gritos reclamó insumos, medicamentos y atención adecuada para los pobladores de la zona.
El mismo dijo que tuvo que adquirir un respirador por G. 93 millones para prolongar la vida de su hijo, aparato que no pudo conseguir del Estado. Dijo que entregará al Hospital de la ciudad para salvar la vida de otros niños.
''Acá en nuestro hospital no hay ninguna unidad de cuidados intensivos para niños. Cuando Axel entró en crisis los doctores se desesperaron, porque no había nada para hacer por él. Equipo humano tenemos acá, pero no tenemos un respirador neonatal pediátrico’’, expresó entre lágrimas.
Don Aníbal resaltó que pudo adquirir el respirado con la ayuda de los pobladores de Coronel Oviedo, mediante la realización de varias actividades.