La frase “la pirotecnia no es un juego”, encaja perfectamente con la situación que se dio en un barrio ribereño de Presidente Franco en víspera de la Navidad, donde seis casas ardieron en llamas luego de que explosivos lanzados por varios niños cayeran sobre un pastizal seco.
Según el reporte, las familias que fueron afectadas quedaron sin nada debido a que absolutamente todo se redujo a cenizas. Los bomberos no lograron llegar a tiempo a causa de las condiciones irregulares del terreno y nada se pudo salvar de las llamas.
Los pobladores son de escasos recursos y están desesperados. Los mismos apelan a la solidaridad de la ciudadanía. “Necesitamos de todo, solo tenemos la ropa que llevamos. Necesitamos de personas de buen corazón que nos ayude”, expresó una de las afectadas.
Mirá el video: