Luego de varias semanas de negociaciones, se dio a conocer que Twitter aceptó que Elon Musk, magnate sudafricano dueño de Tesla y SpaceX, compre la compañía en un acuerdo valorado en alrededor de US$ 44.000 millones.
En un comunicado se dirigió a todos los usuarios de la red social donde aclaró que la compra de la plataforma no supondrá una pérdida de libertad de expresión ni de las críticas a su figura.
“La libertad de expresión es la base de una democracia que funciona, y Twitter es la plaza digital donde se debaten asuntos vitales para el futuro de la humanidad”, expresó.
“También quiero que Twitter sea mejor que nunca mejorando el producto con nuevas funciones, haciendo que los algoritmos sean de código abierto para aumentar la confianza, derrotando a los bots de spam y autenticando a todos los humanos”, agregó.